Todavía recuerdo el día en el que le hablé por primera vez, cuando le dije "Hey tu!? Ves animes?!".. Dios, que tonta me sentí ese día, pero al mismo tiempo agradezco haberle hablado aquella vez.
Recuerdo también aquel día, en el que después de haber estado intercambiando correos, le escribí diciendo que mis clases ya empezaban y me tenía que ir, 15 minutos después de haber iniciado la clase, el profesor fue directo a la puerta y ahí estaba él, verificando si yo llevaba clases en ese salón. Me sentí halagada y a la vez feliz por saber que le importaba.
A veces, el trabajo, los estudios, la salud y la familia hace que uno olvide todas estas cosas, los primeros detalles de la relación, las primeras sonrisas que te robó y esas veces en el que se esforzó por saber si estabas bien de salud, oh sí.. recuerdo claramente el día que fue a visitarme a la clínica, averiguó donde me encontraba, solo para saber que estaba bien.
Cada vez que recuerdo esos momentos vividos, no dejo de sonreír como una tonta, pero debo admitir que me hace feliz recordarlos.
Son muchas las ocasiones en el que uno se siente abatido, se rinde y olvida todas las cosas buenas que trae la vida.
A mi la vida me trajo a Yoshi, un hombre que este corto tiempo juntos, me ha demostrado ser la persona más buena y atenta que existe. Se preocupa por mi, lo que me pasa, pienso, siento, opino, me respeta, admira pero sobre todo, me ama por lo que soy.
Estoy eternamente agradecida con la vida que después de tantos tropiezo, puso a alguien que se preocupo en ayudarme a pararme y limpiar mi rostro.
Arigato Yoshi... eres la buena luz que alumbra mi sendero.
2 comentarios:
Felicidades Nat!!! me alegra, con tan solo saber que tengas una muy hermosa relación :3 !! mis mejores deseos!!
Buen post, es cierto siempre hay una luz después de tanta sombra. La ley de Murphy se puede combatir después de todo. ;)
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